Alfredo Stöhwing (Valdivia, 17 de junio de 1952) se alista para completar su segundo mes al mando de Colo Colo, un periodo corto pero muy acontecido. En su primera entrevista desde que asumió, el ingeniero comercial habla de su etapa inicial al frente de Blanco y Negro y de los desafíos, especialmente, mirando al centenario de la institución en 2025.
¿Cómo han sido estos dos primeros meses?
Muy movidos, bastante intensos. Usted sabe cómo es Colo Colo, lo grande de esta institución, y que todo repercute mediáticamente. Llegando, me tocó la participación en Copa Libertadores, los viajes, los temas de seguridad. Después vino el tema de los refuerzos, que siempre tiene tanta connotación periodística. De repente, el día a día ni siquiera deja concentrarse en los temas a mediano plazo, pero ha sido un honor y un orgullo para un colocolino como yo.
Precisamente, le tocó esa eliminación de la Copa…
Efectivamente. Creo que tuvimos muy mala suerte. Todavía me dan vuelta los goles que nos perdimos contra Alianza, en Lima, lo que nos hubiera facilitado mucho la labor. Después tuvimos mala suerte y un mal arbitraje contra River, en Santiago, y luego el castigo de jugar el último partido sin público. Fue una frustración muy grande.
Más de algún hincha dice que la eliminación tiene que ver con el cambio de directorio.
Yo creo que no tiene ninguna relación, las cosas se vienen haciendo de la misma manera. Los planes ya estaban diseñados para la participación en Copa Libertadores. No es mucho lo que uno puede agregar o disminuir.
¿En qué estado encontró al club cuando asumió?
Tengo bastante experiencia. Fui director durante cuatro años y pasé por diferentes actividades en el club. Ya lo conozco, pero siempre es diferente ocupar la presidencia, por la importancia que tiene en Colo Colo. Había un desafío importante de fortalecer la administración. Por ejemplo, había varios cargos vacantes, que hemos estado trabajando.
¿Y cómo estaba esa estructura administrativa?
Siempre me he tratado de enfocar en fortalecer la administración. Cuando llegué, estaba venciendo el contrato del gerente deportivo, había dos gerencias de área vacantes… Le aprovecho de contar que hace una semana asumió el nuevo gerente de Operaciones, que es don Rodrigo Herrera, un distinguido general en retiro de Carabineros, en el que tengo mucha confianza que con su equipo va a poder dirigir todos los problemas de seguridad y mejorar la experiencia estadio, que es uno de los objetivos que teníamos.
¿Cómo es su relación con Gustavo Quinteros, quien suele expresar públicamente sus sentimientos cuando algo no está resultando?
Sí, los expresa con mucha franqueza, pero tengo una buena relación con Gustavo. Siempre que nos hemos reunido en persona, cada uno desde su lugar, hemos tenido buenas conversaciones e intercambios muy útiles desde los distintos puntos de vista. Es un gran entrenador, que se ha ganado el cariño de la hinchada. Esperemos coronar este año siendo campeones, que es un deseo, aunque no se puede garantizar nada, y después proyectar lo que viene en el siguiente año. Estoy muy contento con su presencia en el club.
¿Qué le pareció que el representante ofreciera a Quinteros a la Selección el mismo día del partido con River?
Fue curioso. No toqué el tema con él. Trato de no hacer eco de lo que no son conversaciones personales porque, si uno pone atención a todo lo que sale en los medios o redes sociales, es imposible abordar todo. Como no me tocó el punto y yo tampoco quise, nunca lo conversamos y ahí quedó.
¿Le molestó?
No, porque hay tanta filtración y tantas cosas que uno no sabe de dónde vienen, que yo prefiero las comunicaciones más personales y serias. Él tenía el legítimo derecho de querer ser entrenador de la Selección y nosotros queríamos que se quedara en Colo Colo, pero siempre tuve confianza de que iba a continuar, así que no le di mayor importancia.
¿Proyecta el próximo año con él?
No hemos conversado nada, falta bastante. Hay que hacer las evaluaciones respectivas. Él lo ha manifestado y nos gustaría que continúe. Se ha hecho un buen trabajo y sería lo más lógico.
¿Pone algún objetivo en la Sudamericana?
No sacamos nada con poner objetivos, el fútbol tiene muchas variables. Nos encantaría pasar de ronda ante un rival muy difícil, que está en un gran momento. Sí nos interesa mucho clasificar a copas internacionales. Colo Colo nunca debería estar fuera de la Copa Libertadores.
¿Cómo evalúa esta ventana de refuerzos?
Vale la pena decir algo desde el comienzo, y es que en enero conformamos un plantel para el año. Tenemos un gran plantel, juveniles de mucho futuro. Soy un fanático de los juveniles. Se dio en esta puerta que se abrió para contratar tres alternativas, lo conversamos con Gustavo e hicimos todos los esfuerzos. Solo hace un par de días pudimos contratar un extranjero (Agustín Bouzat) y trataremos de ver la opción de algún otro, pero no está fácil.
Entonces, ¿llegarán dos jugadores más?
Seguiremos viendo si surge una alternativa, pero no queremos contratar por contratar, ya hemos visto en el pasado que no resulta bien eso. Queremos que lleguen jugadores que sean un aporte y no tapar juveniles por taparlos. Si se da, para fortalecernos en el Campeonato Nacional o un eventual paso a cuartos de final de la Copa Sudamericana, puede ser, porque nos queda algo de plazo.
El técnico quería contar con Ramiro González, pese a que no pasó los exámenes…
El club tiene un protocolo y si un jugador no pasa los exámenes, lo serio es no firmar. Estamos resguardando recursos ajenos de los accionistas y nos pasarían la cuenta. No se puede actuar por tincada, sino que hay un diagnóstico. Muy lamentable, porque era una muy buena alternativa.
¿Puede partir algún jugador ahora?
No, salvo la oferta que llegó por Solari, anteriormente, no hay ninguna más. La intención es mantener el plantel.